Llega como carnaval. Todo nuevo, pero viejo conocido. En la foto, Hada
Creo que en mi otra vida he sido cubano. Si, me imagino cantando en bares habaneros rodeado de gente joven tocando las maracas, riendo y bailando al son de mi canción. Viviendo en un barrio pobre, pero más divertido que ninguno, eso seguro. Y vistiendo manga corta todo el año, allí en Cuba, donde hace calor todo el tiempo. Bañándome en el Caribe y buceando en las profundidades. Pero, sobre todo, disfrutando de la vida, sin importar nada, que lo material pase a tercer plano y que lo principal sea vivir cada instante como si fuera el último. Si, me veo viviendo en Cuba pero, sobre todo, teniendo una perrita llamada Lily.