Pero ahora que un rayo del Sol se refleja en la ventana del edificio de enfrente e, indirectamente, me da a mí, me dan ganas de despreocuparme, de dejar de pensar en cosas que, vistas desde fuera, parecen tonterías. Pero para mí no lo son, ni de lejos. Sé que debo encontrar la manera de ser capaz de empezar solo, pero también sé, que por más que la busque, no la voy a encontrar. Pero bueno, la vida es demasiado corta como para preocuparse.
2 comentarios:
dskfgfgñ
Abajo las preocupaciones inutiles! adhiero totalmente! hermosa foto!
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